martes, 30 de junio de 2015

La versatilidad de los controles de acceso

CONTROL DE ACCESO


Desde tiempos inmemoriales el hombre sabe que su seguridad y protección dependen en gran medida de las barreras de acceso frente a los intrusos. En otros tiempos se utilizaron empalizadas, fortificaciones, puentes levadizos o dispositivos similares.


Hoy en día, con el desarrollo de la electrónica y la informática, contamos con herramientas sofisticadas para evitar que personas no autorizadas o indeseables penetren a los espacios que necesitamos resguardar.

Las características de cada espacio son las que determinan cuáles son las mejores soluciones de seguridad. A veces, bastará con la tradicional “tranca” de la puerta. En otras ocasiones, será necesario emplear medios más avanzados.

La adaptabilidad a los espacios

Es importante que el sistema de control de accesos sea lo suficientemente flexible como para adaptarse a las condiciones variables de cada tipo de edificación.

Los edificios de oficinas, que generalmente tienen un alto tráfico de personas y vehículos, se benefician ampliamente de los controles de acceso. Un sistema de seguridad óptimo permitirá verificar en todo momento quién se encuentra en las instalaciones.

Lo mismo ocurre en las zonas francas, centros comerciales, almacenes y parques industriales, entre otros. Con el plus de que ese tipo de espacios suelen tener áreas restringidas en su interior y, por lo mismo, demandan un control más pormenorizado. Los controles de acceso no solamente monitorean el acceso general, sino que también ofrecen control sobre zonas o dependencias específicas.

Un caso especial es el de los centros médicos y hospitales, que exigen un control minucioso de los accesos y los desplazamientos. La vulnerabilidad de los enfermos hace que el control de ingresos y salidas se convierta en un factor crítico, que debe abordarse con la mayor rigurosidad.

Los controles de acceso también tienen aplicación en las unidades colectivas de vivienda, como áreas de copropiedad o condominios campestres. Uno de los atributos de ese tipo de propiedades es precisamente que ofrecen un mayor grado de seguridad. Esta se alcanza garantizando que quienes circulan por los espacios compartidos están autorizados para hacerlo.

Los controles de acceso como SUPERACCESS pueden instalarse, sin ningún problema, en prácticamente todo tipo de espacios. En sitios como edificios de oficinas, zonas francas, parques industriales, centros médicos, condominios campestres, entre otros.

Un sistema modular

Los sistemas modulares son especialmente indicados para ejercer una vigilancia minuciosa. Están compuestos por unidades diferenciadas, pero interrelacionadas entre sí, que se conocen con el nombre de “módulos”. Cada módulo realiza funciones diferentes, según las necesidades del espacio en donde se instalen.

De ahí que se hable de “versatilidad” en los controles de acceso. El sistema modular está en capacidad de adaptarse a las necesidades de seguridad de cada espacio. No es solamente una herramienta electrónica que sirve como barrera, sino un mecanismo inteligente para gestionar la seguridad.

LECTOR DE HUELLAS
SUPERACCESS de SUPERVISA cuenta con varios y eficientes módulos para la gestión de la seguridad. Como los módulos de Gestión en Recepción y el de Pre-autorización Individual. El primero permite consultar la información del visitante que llega a la recepción de la empresa o de la copropiedad. Allí se determina si cuenta con una autorización válida o no. El sistema arroja cuatro tipos de respuesta frente a los usuarios que pretenden ingresar: usuario autorizado, usuario no autorizado, usuario no registrado y usuario bloqueado.

El módulo de Pre-autorización Individual complementa al anterior. Esta funcionalidad solo puede ser activada por el administrador de cada empresa y permite dar acceso a personas que no se encuentran registradas, pero que por razones comprobables pueden entrar en las instalaciones para un fin específico. Una acción similar puede realizarse con los vehículos.

Otros módulos permiten controlar el acceso de mensajeros y domiciliarios, que son un factor dinámico e inestable que también exige supervisión. Así mismo, hay un módulo especial para realizar control de acceso durante los días festivos, bloqueos de personas, informes, tableros de tráfico, entre otros.

Atributos con plus

El control de acceso no se limita a generar barreras de ingreso. A tono con una perspectiva integral, esa acción debe estar complementada con otros atributos que incrementen la seguridad y faciliten el control.

Lo ideal es poder realizar bloqueos selectivos, bien sea a las instalaciones en general o a un área específica. Además, resulta importante contar con otras funcionalidades que ayuden a que la gestión de visitantes sea más coherente.

Los sistemas más eficaces activan una alerta cuando se efectúa la preautorización de alguien que aparece bloqueado en el sistema. De este modo, el administrador del parque, o el administrador de la empresa, se enteran de la novedad.

Otro elemento a destacar es la posibilidad de un sistema para realizar bloqueos diferenciales. Los más tradicionales se aplican a personas, pero los más novedosos pueden aplicarse por tiempo o por área.

Información y funcionalidad

Es importante que el sistema de control de acceso esté en capacidad de generar varios tipos de reportes, siempre con la finalidad de perfeccionar y sofisticar cada vez más la gestión de seguridad.

Así mismo, el sistema de control de accesos debe poder combinarse con otros sistemas de seguridad para ofrecer un servicio óptimo. Lo más frecuente es integrarlo con Circuitos Cerrados de Televisión (CCTV), ya que la disponibilidad de imágenes en tiempo real incrementa el grado de control y amplía las posibilidades del sistema en materia de monitoreo y pruebas.

SUPERACCESS genera informes de personal, con datos sobre su nivel de autorización para el ingreso, vigencias, caducidades y rutas. También es posible obtener consolidados históricos con todas esas variables.

Todo el andamiaje del sistema se puede operar a través de tableros de control que concentran la información y permiten un monitoreo centralizado y en tiempo real. Lo mejor es que ya existen aplicaciones móviles que hacen posible manejar el sistema desde un teléfono móvil.


jueves, 28 de mayo de 2015

Optimización en el control de accesos

BARRERAS DE ACCESO


Actualmente el concepto de “control” es más complejo de lo que fue en el pasado. En general, se define como el conjunto de acciones, medios y datos que permiten prevenir y cubrir los eventos de riesgo. En el caso de los controles de acceso, lo que se resguarda es básicamente la entrada, permanencia y salida de las personas y objetos que ingresan a una edificación.

Para que el sistema de control de accesos funcione de manera óptima, se deben tomar en cuenta múltiples variables. En todo caso, lo más importante es que los medios humanos, los medios técnicos y los medios organizativos funcionen de manera coherente y apunten a un mismo fin.

La eficiencia se logra auditando y optimizando cuatro (4) aspectos principalmente: agilidad, validación, plataforma e información.

Agilidad: una garantía para la seguridad

Un sistema de control de accesos verdaderamente eficiente debe cumplir tres funciones que están relacionadas entre sí: detectar, alertar y reaccionar. En todas ellas el tiempo es un factor crucial. En otras palabras: si el sistema está en capacidad de actuar rápidamente, se incrementa significativamente su eficiencia.

La agilidad comprende varios componentes: rapidez en la alimentación de datos del sistema, es decir, capacidad para ingresar y sistematizar la información de sus usuarios, de una manera veloz; rapidez en la contrastación de datos, o sea, en la validación de identidad de quienes entran y salen; celeridad tanto en la instalación de los sistemas de control de accesos, como en registro de eventualidades y la respuesta del soporte técnico.

Un sistema de control de accesos solamente es eficiente si está en capacidad de ofrecer respuestas rápidas en sus tres funciones básicas. Cada retraso en las operaciones supone un aumento del peligro.

Validación: el corazón del sistema

Las credenciales de identificación son un punto clave en el sistema de seguridad. Respecto a su vigencia, pueden ser de tres tipos: permanentes, temporales o específicas. Las primeras se otorgan a las personas o vehículos que cuentan con acceso constante a las instalaciones. Las segundas son para quienes periódicamente ingresan. Las últimas cumplen la función de identificar a quienes acceden a la edificación solamente por un motivo concreto.

Hay tres tipos de medios para autenticar la identidad de una persona o vehículo: 1) Mediante algo que la persona sabe, por ejemplo una contraseña, un PIN o una clave de acceso. 2) Mediante algo que la persona porta, por ejemplo una tarjeta inteligente, documentos de identificación nacional, licencias de conducción, entre otros. 3) Mediante algo que el usuario es, es decir, algún rasgo que le pertenece de manera única; por ejemplo, sus huellas dactilares y los diferentes elementos biométricos.

SISTEMAS DE CONTROL DE ACCESO
Al implementar un sistema de control de accesos debe examinarse cuidadosamente cuál es la modalidad de validación que mejor se ajusta a los propósitos de seguridad de la edificación. Entre más complejo sea el riesgo, más completa debe ser la autenticación.

Operación de la plataforma

Los controles de acceso se gestionan a través de plataformas diseñadas específicamente para esta función. Para alcanzar un rendimiento óptimo, estas plataformas deben ser funcionales y amigables.

Funcionalidad significa que cumplen con los requerimientos necesarios para llevar a cabo su labor. Deben ser capaces de realizar las tareas necesarias para un adecuado control de acceso: detectar intrusos; mantener el control sobre la entrada, circulación y salida de personas y vehículos; realizar registros óptimos de la actividad en todos los puntos de acceso; tener capacidad para intercomunicarse con los demás componentes de la red de seguridad; y garantizar una adecuada protección de la información y las comunicaciones.

Por su parte, una plataforma amigable supone un diseño pensado para facilitar el manejo de los usuarios. Particularmente, debe reducir los pasos necesarios para operarla y contar con una configuración que pueda ser descifrada intuitivamente. Esto quiere decir que no debe exigir conocimientos avanzados en informática, sino operar de tal modo que el usuario entienda fácilmente los pasos que debe realizar para llevar a cabo una función o tarea.

SUPERACCESS es la solución que ofrece SUPERVISA para que los usuarios puedan disponer de una plataforma ágil, confiable y completamente amigable. Tiene además la ventaja de que opera como un SaaS, software como servicio en la nube.

Seguridad de la información

En materia de seguridad electrónica, también aplica aquello de que “quien tiene la información tiene el poder”. Por lo tanto, al proteger la información se está salvaguardando uno de los elementos fundamentales para la seguridad global del espacio que se pretende mantener bajo control.

El control de acceso a la información implica tres procesos: autenticación, encauzamiento y verificación.

La autenticación permite identificar al usuario que pretende acceder a la información. El encauzamiento tiene que ver con otorgarle a quien accede, de acuerdo con los privilegios con los que cuente, un acceso diferencial a la información; algunos podrán ingresar a todos los datos, mientras que otros solo tienen vía libre a una parte de ellos. Finalmente, la verificación es el proceso a través del cual se detecta y corrige cualquier desvío en el acceso a la información.

El sistema debe estar en capacidad de garantizar el adecuado manejo de la seguridad en la información. De lo contrario, cualquier otra medida puede resultar completamente inútil. ¿Qué pasa si alguien no autorizado puede acceder a contraseñas de acceso, por ejemplo? En ese caso, todo el sistema, o gran parte de él, se desploma. De ahí la importancia de este componente.

La optimización de seguridad depende principalmente de un diagnóstico verdaderamente profesional y de un servicio que cuente garantías suficientes. Es lo que SUPERVISA puede ofrecer a sus usuarios: alto nivel de confiabilidad para una gestión eficaz de la seguridad.